06/03/2024 Inauguración de las Oficinas de la Gerencia Explotación de Montevideo en emblemática edificación

El martes 6 de marzo con la presencia del Directorio en pleno, se inauguraron las obras de remodelación y puesta en valor patrimonial del destacado edificio construido en 1965, ubicado en la Av. Gral. Flores, donde funcionan hoy las oficinas de la Gerencia Explotación Distribución Montevideo de UTE.

En el emotivo acto, acompañaron a las autoridades, los hijos de los proyectistas originales Arq. Mario Payssé e Ing. Eladio Dieste que, junto a las funcionarias de UTE y encargadas de la remodelación arquitectas Betina Irabuena y Sandra Martínez, fueron quienes descubrieron una placa conmemorativa del acontecimiento.

Silvia Emaldi, presidenta de UTE reconoció los trabajos realizados por la Comisión de Patrimonio de la empresa, creada por el presente Directorio, y destacó el significado de este importante significativo legado para las generaciones presentes y futuras de funcionarios.

Resaltó, además, la importancia de que las obras fueran llevadas a cabo por dos trabajadoras de la empresa e hizo un recordatorio especial por el corriente Mes de la Mujer.

“Estar aquí hoy es reconocer este patrimonio, este legado que tiene UTE como empresa con 111 años de vida, renovando nuestro compromiso de continuar brindando diariamente con vocación un servicio de calidad para todos los uruguayos”, subrayó Emaldi.

VALOR PATRIMONIAL

El proyecto original del edificio fue elaborado a mediados de la década del sesenta para la sucursal Goes del Banco Popular, con la particularidad que tiene una concepción liberada de esquemas que rompe con la tradición para edificios bancarios.

Consiste en una gran nave rectangular de cerámica armada de una cuadra de largo que genera un espacio homogéneo. La cubierta, técnicamente modelada, fue diseñada dando una fuerte impronta, expresividad y protagonismo. El resultado es un espacio de alta calidad arquitectónica y notoria plasticidad.

El área interior cuenta con luz natural que desciende de los lucernarios generados por la curvatura de la bóveda. Desde el exterior se percibe la integración urbana entre lo público y privado mediante la perfecta utilización de elementos: parasoles, vigas y vegetación.

Las fachadas fueron diseñadas en metal y vidrio. En el subsuelo, se concede al arte un lugar protagónico, es así que enfrentado a donde se ubicaba el tesoro del Banco, se encuentra un mural-fuente, desarrollado por el artista Edwin Studer, de la escuela de Torres García.